NATURALEZA VIBRANTE

En la serie pictórica Naturaleza Vibrante se visibilizan artísticamente, especies vegetales, animales y cuerpos de agua, Resaltan la belleza y la riqueza de la biodiversidad y dan marco a la configuración del equilibrio ecológico natural, expresado en una dinámica viva, colorida, vibrante y biodiversa, de lo que es la naturaleza armónica, entendida en el equilibrio de sus partes componentes, es la biosfera, como sistema dinámico y viviente. 

La serie está conformada por las siguientes pinturas: Gaia, naturaleza viva, caño cristales, guayacán rosado, manglar, girasoles, frailejones, cascada rio toche, bosque de pino, bosque de pino soleado, bosque de niebla, cascada, paisaje cascada, cascada salto del Tequendama, belleza polar, polinización, polinización, colibríes polinizando, colibrí polinizando, abeja polinizando, mariposa polinizando, murciélago polinizando, polinización de abejas, frutos de polinización.

Gaia es vista como un símbolo de la tierra viva, una entidad consciente que merece respeto y protección”

La obra pictórica Gaia se trae a colación en esta exposición, apuntando a resaltar al planeta tierra como planeta viviente, Gaia es un sistema que tiende al equilibrio basado en la idea de que la biosfera autorregula las condiciones del planeta para hacer que su entorno físico sea más hospitalario con las especies que conforman la vida del mismo. Es un super organismo que modifica activamente su composición interna para asegurar su supervivencia.

Gaia muestra el camino hacia la circularidad, en este camino, lo que un organismo crea o genera como residuo, es materia prima para el siguiente organismo. Por tanto, es un sistema que crea todo lo que necesita y no malgasta nada. 

Asimismo, la polinización es el acto supremo de la naturaleza en que la relación de los polinizadores y las flores, producen los frutos que sustentan la alimentación humana y de las diferentes especies de las cadenas tróficas y que contribuyen a la perpetuación de la biodiversidad. La muestra pictórica alude no solamente a los polinizadores expuestos en su belleza natural, sino al acto de polinización en vivo entre polinizadores y flores y a frutos derivados de la polinización. frutos vegetales que se convierten en fuente de alimentación y en perpetuación de la biodiversidad. 

La especie humana, el homo sapiens, es la única que ha desarrollado un ecosistema artificial, constituyéndose en un vector de perturbaciones antropogénicas que afectan el equilibrio del planeta.